domingo, 6 de julio de 2014

La OEA y los buitres/Editorial El Nacional domingo 06jul14

Foto de archivo
Fue nada menos que una Reunión de Ministros de Relaciones Exteriores, la que se reserva en la OEA para “considerar problemas de carácter urgente y de interés común para los Estados Americanos”, la que se ocupó el jueves del politizado tema de la deuda soberana de Argentina.


En la declaración de apoyo al gobierno de Cristina Kirchner, excepto por Estados Unidos y Canadá, se defiende “la estabilidad y predictibilidad de la arquitectura financiera internacional” ante el temor de que, mediante sentencias judiciales, se modifiquen los términos acordados entre deudores y fondos de acreedores.

En realidad, aunque tantos países hayan acogido la denominación populista de “fondos buitres”, la vasta mayoría, los que han llevado sus cuentas y relaciones financieras en orden, no tienen nada que temer.

En cambio, el gobierno argentino que hoy pide apoyo ha sido tremendamente irresponsable en el manejo de la economía: concentró un sordo poder de decisión, cada vez más intolerante a la crítica; desde su extrema opacidad, alimentó la corrupción y, con un agresivo estilo populista, multiplicó las expropiaciones y abusó de los subsidios y las reservas del Banco Central.

Ahora achaca a otros las culpas de los fracasos económicos propios, y ha encontrado en la OEA sostén para desconocer la sentencia de la Corte Suprema de Estados Unidos que favorece a los pocos acreedores que no aceptaron las imposiciones de 2005 y 2010.

Para esto sí se mueve la OEA. A la vista queda que sus socios latinoamericanos y caribeños, allí y en el Mercado Común del Sur, la Unión Suramericana de Naciones y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, no le aplicaron a esta situación los mismos criterios que a las repetidas decisiones inconstitucionales, destructoras del régimen democrático y las garantías de los derechos humanos tomadas por el Tribunal Supremo de Justicia venezolano.

La clave está en que fue el gobierno argentino el que llevó el asunto ante sus pares. Y estos aceptaron ser parte de una estrategia de presión política, mientras que, ya con un mediador designado por el juez del caso, se preparaban las negociaciones entre representantes del gobierno argentino y los tenedores de bonos. Esos encuentros se iniciarán mañana lunes.

El propio José Miguel Insulza dijo sobre el caso argentino: “Cuando hay una situación en la que hay una evidencia tan seria, un problema tan doloroso, que hay riesgo de crisis para el sistema internacional, nos ponemos de acuerdo y de manera muy sólida”.

Este es el mismo Secretario General y la misma OEA, que en Venezuela subestimaron la gravedad de casi medio centenar de muertes, decenas de heridos, más de 3.000 detenidos y graves denuncias sobre maltratos y torturas, a lo que se sumaron las detenciones de alcaldes y de un dirigente político así como la destitución de una diputada de manera ilegal.

Cómo para revisar quiénes son y por dónde andan los buitres.

No hay comentarios:

Publicar un comentario