lunes, 16 de julio de 2012

¿Vendrá también este otro mea culpa?/VenEconomía lunes 16jul12

Por: VenEconomía
Este fin de semana desde Anzoátegui, Hugo Chávez hizo un amago de mea culpa por el evidente deterioro en el que se encuentra la infraestructura vial de ese estado y por las incesantes fallas eléctricas registradas, reconociéndolos como fallas de su revolución.

Lo cierto es que las fallas citadas existen, y se deben a dos de los grandes males que aquejan a esta revolución castrocomunista: la falta de inversión y falta de mantenimiento.
Saltan a la vista ejemplos de las nefastas secuelas de estas faltas, que van desde lo más micro, como lo sería suministro de agua en un barrio, hasta el colapso de empresas del Estado, tales como Venalum, SIDOR y, sobre todo, PDVSA donde hoy se producen un millón de barriles diarios menos que hace 14 años.
Peor aún, si cabe, es que a PDVSA, otrora orgullo por ser una empresa líder en seguridad industrial, hoy le sobran dedos de las manos para contar las horas que lleva sin accidentes.
Según datos de la ONG Gente del Petróleo, desde 2003 hasta marzo de 2012 se contaban 77 trabajadores fallecidos en unos 300 accidentes graves en las instalaciones de PDVSA, y cinco de ellos sólo en el primer trimestre de 2012.
Por su parte, los accidentes en refinerías, que PDVSA denomina “eventos operativos”, representaron casi 41% de los 22 accidentes ocurridos en la industria en los últimos seis meses. Una síntesis rápida da este revelador balance:
En la Refinería El Palito (Carabobo) del 3 de enero al 1º de marzo: El craqueador catalítico salió de línea por falla en el sistema de válvulas; una fuga de gas tóxico obligó a PDVSA a paralizar y evacuar temporalmente esta refinería y un incendio la paralizó parcialmente.
En la de Cardón (Falcón) en el primer semestre explotó un horno; se incendió la unidad de alquilación y se registró una falla en una línea de aire que paralizó por completo la refinería por varias horas.
En la de Amuay (Falcón) entre el 9 de enero y el 28 de junio se rompió una tubería de un horno que paralizó la unidad de destilación; un incendio paralizó la misma unidad de destilación por segunda vez en un mes y una falla en el sistema de enfriamiento obligó a PDVSA a sacar de línea la unidad de destilación.
¿Obligará este dramático balance a que Chávez haga su próximo mea culpa por el evidente fracaso revolucionario en PDVSA?


No hay comentarios:

Publicar un comentario