viernes, 17 de junio de 2011

La Revolución no llegó a VTV

En en canal del Estado el contrato colectivo vigente tiene más de 20 años. Los trabajadores de la Fundación Teresa Carreño también exigen el respeto de sus derechos laborales


Por: Keilyn Itriago Marrufo/TalCualDigital
Los trabajadores del canal del Estado (Venezolana de Televisión) sostienen que la revolución que defiende y promulga el presidente Chávez debería traducirse en cambios. Sin embargo, el contrato colectivo que establece sus derechos laborales no ha sido modificado desde hace 21 años, pese a que el sindicato de trabajadores ha venido peleando su renovación.

Igor Alcalá, secretario general del sindicato Movimiento de Trabajadores Organizados de los Medios Audiovisuales de Venezuela (Motormav), explica que el 6 de abril del presente año, el grupo que representa consignó ante la dirección de Inspectoría Nacional y Otros Asuntos Colectivos un proyecto de convención colectiva de trabajo para el período 2011-2013. No obstante, hasta la fecha el Ministerio del Trabajo mantiene hermetismo y silencio administrativo con relación al proyecto.

“Dicha tardanza contribuye a la acumulación de una deuda social y económica enorme contra los empleados”, asevera Alcalá, quien reitera que se está violentando el derecho constitucional de los trabajadores al logro de mejoras laborales.

Asimismo, manifiesta que están en desventaja con relación al aumento salarial decretado por el Presidente de la República, ya que el contrato colectivo actual no admite la existencia de un tabulador que permite un incremento en el sueldo devengado.

“Si nosotros tenemos un compromiso con el Gobierno, y ellos no cumplen con nosotros, entonces tenemos que llamar la atención. Afirmamos que aquí en VTV no ha llegado la revolución ni el socialismo”, revela Alcalá.

DISGUSTO EN EL TERESA CARREÑO
“Basta de engaños, queremos soluciones”, “Cumplan con las deudas”, “Los bailarines estamos mal pagados”, son las consignas que pudieron verse en la manifestación protagonizada por quienes día a día laboran en la Fundación Teresa Carreño, frente a la violación constante del contrato colectivo vigente. Hoy a las nueve de la mañana se pone fin a una paralización de 24 horas de sus actividades.

“Estamos en un pliego conflictivo que tiene más de tres años y no hemos logrado que las autoridades honren todas las cláusulas exigidas”, afirma Luis Borges, secretario general del sindicato de trabajadores del Teatro Teresa Carreño.

Entre las denuncias de los empleados están el incumplimiento en el pago de las horas extras, el inexistente reajuste de los cestatickets, el irrespeto de la política habitacional y la negativa sobre el aumento de salarios. “Actualmente tenemos una compañía de seguros que ha incumplido con las peticiones de los trabajadores”, agrega Borges, quien además señala que luego de que el Ministerio de Cultura centralizara el gozo de seguro médico, los empleados se han visto afectados fuertemente. Ya que se les ha limitado a gozar de un número determinado de consultas médicas, así como de gastos en medicina.

Otro de los temas que preocupa al personal de la Fundación es el peligro latente que sufren los empleados que ejercen funciones de alto riesgo, ya que no existe atención médica oportuna en las instalaciones.

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