miércoles, 11 de julio de 2012

Arte por el suelo

Los huecos en las calles de toda Venezuela nacen, se desarrollan y se reproducen sin cesar. Están a la mano (o más bien, a los pies) y no son tomados en cuenta, aunque por encima de ellos transiten todo tipo de vehículos

MARIZA ITURRIZA/TalCualDigital
Los huecos en el pavimento de nuestras calles están muy desacreditados. Ya que tenemos que vivir con ellos habrá que ponerse a investigar las posibilidades de convertirlos en algo positivo: obras de arte, por ejemplo. Yo me atrevería a recomendar que empezáramos a decorarlos con pintura por los bordes imitando flores, astros, rostros, lo que se le ocurra a artistas o a cualquiera que se anime, ponerlos bien bonitos. Los que tienen agua empozada podrían sustentar algún cultivo. Propondríamos concursos para premiar al más grande, al más profundo, al más largo, al más tradicional, al más espectacular; los ganadores podrían ser nombrados Huecos Fiscales.

Los huecos son verdaderos demócratas. Por encima de ellos transita todo tipo de vehículos, tanto los lujosos y poderosos último­modelo como las decrépitas chatarras de transporte colectivo, amén de infinidad de peatones. No discriminan.

Nacen, se desarrollan y se reproducen sin cesar. Están a la mano (o más bien, a los pies) y no son tomados en cuenta, despilfarrándose un recurso que, de aprovecharse, haría de nuestras calles museos gigantescos porque, gracias a la ausencia de mantenimiento vial, no necesitan presupuesto ni estarían limitados a determinada corriente. Expondrían obras de Arte por el Suelo no afectadas por decretos, ordenanzas, tendencias o leyes del mercado. Claro que se corre el riesgo de que, en algún momento, alguna instancia ordene repararlos y desaparezca la obra, pero los ciudadanos estarán pendientes de reiniciar el proceso esmeradamente apenas se insinúe la gestación de cualquier huequito o grietita.

Estando de moda los colectivos, para la ejecución de tal proyecto podrían someterse a consideración las siguientes medidas: Comité del Poder Popular Pro­defensa de Huecos (¿COPOPOPRODEHUE?) o Sociedad Protectora de Huecos y Afines (SOPRODEHUEYAFI). Afines son, por ejemplo, alcantarillas levantadas, láminas de metal dobladas, los tornillos salientes cuando quitan vallas, hundimientos, escombros, basura, obstáculos, etc.

Localizar los huecos.

Decorarlos libremente, de acuerdo con el criterio de quien se haga cargo.

Convocar la participación de individuos, consejos comunales, condominios, etc., a armarse con sus envases de aerosol o de pintura y brochas (pueden ser sobrantes) y dejarse llevar por la inspiración artística. Hueco = Arte. Los nuestros serán los huecos más artísticos del mundo.

No maltrate al hueco. No pise el hueco. Cuidado, hueco bravo. El Hueco no te pisa: Tú eres quien pisa al hueco. Aaatención: hueco cerca... Humanos y vehículos agreden a los huecos.

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