martes, 4 de septiembre de 2012

Pdvsa desmantelada


La estatal petrolera no tiene personal calificado. Para Heliodoro Quintero los accidentes antes del 2003 estuvieron dentro de las estadísticas normales. Expertos insisten en que la explosión ocurrió por falta de planificación. Además consideró que un accidente como el ocurrido debe llevar planes de contingencia más efectivos

ELINOR MADERO MARTÍNEZ/TalCualDigital
Aunque se evidenció que existe falta de mantenimiento en las instalaciones de Pdvsa y aún no se conocen las causas por las cuales ocurrió la explosión en la refinería de Amuay, muchos expertos no se explican a dónde se fueron los mil millonarios recursos petroleros recibidos por el Gobierno así como los avisos sobre inminentes riesgos que pudieron evitar esa tragedia.

Para el ex embajador ante la OPEP, Heliodoro Quintero, hace nueve años los accidentes en la industria petrolera, estuvieron enmarcados dentro de las estadísticas de la accidentalidad global, de este género de industria, es decir en un mínimo, y así si mantuvieron hasta ese momento.

"Luego del 2003, la industria petrolera nacional adquirió empleados, hasta alcanzar hoy día hasta casi los 129 mil, aproximadamente cinco veces más del numero que quedó después del paro petrolero mencionado, en ningún caso profesionales, ni dedicados a las labores profesionales e industriales petroleras correspondientes".

Esto a su juicio se tradujo en "un aumento exponencial hasta la fecha de los accidentes fatales y no fatales de la misma, lo cual deja claro una de las tantas consecuencias negativas de manejar una empresa de esta manera".

En este sentido aseguró que "dentro de este cantidad de personal en la industria, y de desorganización en general, podemos enfocar en una refinaría como Complejo Refinador de Paraguaná - Amuay, como una gran potencia de desastre".

Según Quintero se debe tomar en cuenta que un accidente como el ocurrido deben llevar planes de contingencia más efectivos, "En muchos casos el material almacenado es alejado del resto de las plantas y actividades en general de una refinería, y esto se debe a que la capacidad explosiva considera un peligro de alrededor de 20 km".

RINDIENDO CUENTAS
Como parte de las incógnitas sobre la explosión la organización dirigida por Mercedes de Freitas de Transparencia Venezuela, revisó las memorias y cuentas de Pdvsa, así como las partidas y observaron los programas y proyectos de conservación ambiental, saneamiento y restauración de áreas afectadas por derrames, monitoreo de calidad de los efluentes líquidos o proyectos para minimizar la quema y venteo de gas que pasaron de 231 millones de dólares a 118 millones.

Sobre lo encontrado mencionan que durante en 2011 Pdvsa solamente recuperó 79.599 barriles de crudo que derramó por accidente, lo cual representa el 64% del total; y limpiaron 354 mil metros cuadrados, 19% de la superficie afectada.

Por ello insisten en solicitar a las autoridades petroleras que presenten los informes que han entregado al Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laboral (Inpsasel) así como la cantidad de inversión en materia ambiental.

Según Transparencia Venezuela cada vez que ha ocurrido un accidente en alguna de las instalaciones de Pdvsa no es notificado debidamente, y con ello consideran que las decenas de fallecidos y heridos han podido prevenirse, pues entre 2010 y 2011 su presupuesto para proyectos de saneamiento industrial se redujo en alrededor de 49% en promedio.

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