viernes, 25 de abril de 2014

Chalbaud: "Maduro está viviendo momentos difíciles"

El dramaturgo estrena mañana su obra "Bingo" durante el Festival de Teatro.
ÁNGEL RICARDO GÓMEZ |  EL UNIVERSAL
En un año en el que han partido figuras como Simón Díaz, Gustavo Rodríguez, Mayra Alejandra y Oswaldo Vigas, Román Chalbaud no teme a la muerte. Con 82 años (Mérida, 10 de octubre de 1931) tiene el ritmo de vida de un jovencito: está en la posproducción de su película La planta insolente, sobre Cipriano Castro; estrena este fin de semana su más reciente obra de teatro, Bingo; y está por firmar un contrato para que El pez que fuma sea rodada en España.


Como Buñuel, dice: "Soy ateo, gracias a Dios", y agrega, "Yo creo en la vida... No tengo ningún problema con la muerte. Yo sé que me voy a morir algún día. El otro día dije: 'Yo creo que me voy a morir a los 87' (risas). No le tengo miedo, es una cosa natural. Mi mamá murió casi a los 100 años", dice mitad en broma, mitad en serio.

Bingo, la obra que clausura el Festival de Teatro de Caracas, es precisamente una celebración de la vida. Andy Ramírez, un septuagenario venezolano, llega a un ancianato en Nueva York para convertir el gélido espacio en un excitante y sensual ritual de recuerdos, emociones y sensaciones.

"Esta obra surgió en 1980. Yo me fui a Nueva York por un año, a estudiar inglés, y después hice un curso con Lee Strassberg. Estando allá me encontré a dos personajes: uno, un venezolano que se fue a vivir allá porque amaba la ópera; y el otro se llamaba Santiago Polarski, un argentino que escribía farándula. Un día me dijo que también dirigía un asilo de ancianos y me llevó: Era un apartamento donde tenía 8 ó 9 viejitos. Y me contaba: 'Ellos son muy traviesos, se meten detrás de las cortinas, se rascabuchean, se enamoran...'. Entonces empecé a escribir como 15 páginas", recuerda Chalbaud, quien tardaría 30 años en retomar la obra.

"En aquella oportunidad se me cerraron las puertas, empecé a escribir, no me salía nada, y en 2011, como en noviembre, la abrí, leí las 15 páginas, y los personajes me empezaron a dictar todo", cuenta el dramaturgo, quien en principio iba a dirigir la obra pero los compromisos con el cine se lo impidieron. Fue entonces cuando delegó en Costa Palamides, quien cuenta con un elenco encabezado por Aura Rivas, Francis Rueda, Gladys Prince, Ludwig Pineda y Vito Leonardo.

"Es tragicómica y muy divertida. Es sobre esta gente que actúa como que si fueran jóvenes, y entonces están llenos de vida", dice Chalbaud, quien se siente reflejado en la obra. "Yo pienso que uno está vivo, la edad depende del corazón y de la mente de uno".

Tras su estreno mañana y el domingo en el Teatro Bolívar (antiguo Cine Rialto), Bingo tendrá otra temporada en la Casa Rómulo Gallegos.

Chalbaud termina dos piezas más, Los espíritus animales y El garage. "Yo siempre he empezado las obras sin saber lo que va a pasar al final, no planifico la obra y nunca sé como va a terminar y para mí es interesante porque yo mismo me lo pregunto y ellos mismos me van dictando. Mis obras siempre comienzan por personajes que yo invento o copio de la realidad, y mezclo unos con otros", señala.

¿Y la política? Para nadie es un secreto que Chalbaud simpatiza con el proceso que inició Hugo Chávez.

-A un año de la gestión de Nicolás Maduro, ¿qué balance haría? 

-Yo estoy de acuerdo con el socialismo y él ha mantenido la línea y está viviendo momentos muy difíciles, mucho más terribles que los que Chávez vivió porque esta oposición que tenemos a mí me parece que es muy torpe, que está haciendo cosas que no se deben hacer.

-¿Y no cree que hay razones para el descontento, como la inflación, la escasez...?

-Es posible, pero también esa escasez es provocada por la misma gente que tiene el poder económico.

-¿No tendría responsabilidad alguna el Gobierno? 

-Sí tiene, pero si tu está rodeado de gente que tiene gran poder económico y entonces te esconde los productos, te sube los precios, te empieza a hacer la vida imposible, es una situación realmente difícil...

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