MOSCU (AP) - La cámara alta del parlamento ruso ratificó el miércoles un Pacto sobre armas nucleares con Estados Unidos, un asunto prioritario de los esfuerzos del presidente Barack Obama para "reasentar" las relaciones con Moscú.
El tratado limita que cada país mantenga 1.550 ojivas estratégicas, en un descenso del actual que llega a los 2.200. Asimismo restablece un sistema de vigilancia que concluyó en diciembre del 2009, al haber expirado el Tratado de Reducción de Armas Estratégicas de 1991.
La aprobación unánime el miércoles del tratado por parte del Consejo de la Federación de Rusia tuvo lugar un día después que fuera aprobado por la cámara baja del parlamento. Ahora tiene que ser refrendado por el presidente Dmitry Medvedev.
El pacto fue aprobado por el Senado estadounidense el mes pasado después que Obama presionó enérgicamente para su aprobación, haciendo llamadas telefónicas a un grupo de titubeantes senadores republicanos a que comprometieran sus votos.
Los demócratas buscaron apaciguar a algunos senadores republicanos al permitirles plantear sus inquietudes sobre el tratado en la una resolución adjunta. La ratificación no afectó el texto del tratado, pero los legisladores rusos se vieron obligados a realizar su propia interpretación de las enmiendas del tratado en su proyecto de ratificación y declaraciones adjuntas.
Mientras que la resolución del Senado dijo que el tratado no debe afectar los planes estadounidenses de desarrollo de un sistema de defensa misilística, en tanto el proyecto de la Duma sostiene que el tratado sólo se puede cumplir si las defensas misilísticas no atentan contra la disuasión nuclear rusa.
El proyecto ruso también imita la preocupación de la resolución del Senado de que el arsenal nuclear restante sea efectivo al enfatizar la necesidad de modernizar las fuerzas nucleares de Rusia.
El tratado limita que cada país mantenga 1.550 ojivas estratégicas, en un descenso del actual que llega a los 2.200. Asimismo restablece un sistema de vigilancia que concluyó en diciembre del 2009, al haber expirado el Tratado de Reducción de Armas Estratégicas de 1991.
La aprobación unánime el miércoles del tratado por parte del Consejo de la Federación de Rusia tuvo lugar un día después que fuera aprobado por la cámara baja del parlamento. Ahora tiene que ser refrendado por el presidente Dmitry Medvedev.
El pacto fue aprobado por el Senado estadounidense el mes pasado después que Obama presionó enérgicamente para su aprobación, haciendo llamadas telefónicas a un grupo de titubeantes senadores republicanos a que comprometieran sus votos.
Los demócratas buscaron apaciguar a algunos senadores republicanos al permitirles plantear sus inquietudes sobre el tratado en la una resolución adjunta. La ratificación no afectó el texto del tratado, pero los legisladores rusos se vieron obligados a realizar su propia interpretación de las enmiendas del tratado en su proyecto de ratificación y declaraciones adjuntas.
Mientras que la resolución del Senado dijo que el tratado no debe afectar los planes estadounidenses de desarrollo de un sistema de defensa misilística, en tanto el proyecto de la Duma sostiene que el tratado sólo se puede cumplir si las defensas misilísticas no atentan contra la disuasión nuclear rusa.
El proyecto ruso también imita la preocupación de la resolución del Senado de que el arsenal nuclear restante sea efectivo al enfatizar la necesidad de modernizar las fuerzas nucleares de Rusia.
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