La semana pasada el general retirado Antonio Rivero, ex director de Protección Civil, denunció la presencia de efectivos cubanos dentro de la Fuerza Armada "más allá de lo debido", al punto que supuestamente están impartiendo instrucciones en algunos cuarteles.
Según Ochoa Antich, si el apoyo militar de Cuba se limitara exclusivamente a problemas de respaldo en materia de instrucción, debido a que Venezuela cambió su doctrina de guerra, se podría justificar su presencia. Pero lo que no se puede aceptar es que esos efectivos estén en órganos de seguridad del Estado, como se han denunciado.
"El problema supera el de instrucción para transformarse en seguridad del Estado, y lo más grave que al permitirse que se haga eso es un delito militar, que es el de traición a la patria", manifestó en declaraciones a El Universal.
Sostuvo que no se puede entregar a otra potencia extranjera elementos de seguridad de Estado porque se compromete la soberanía del país. Al tiempo que negó que en el pasado militares estadounidenses estuvieran infiltrados en la Fuerza Armada.
Dijo que en efecto hubo una misión norteamericana cuya misión era de coordinación de cursos, pero en ninguna forma se le permitió el acceso a elementos de seguridad del Estado. "No controlaban ninguno de los organismos de inteligencia", expresó.
El ex titular de Defensa recordó que la función de todos los componentes de la FAN es defender la soberanía nacional y colaborar con las autoridades civiles en caso de alteraciones graves de orden público.
Yaneth Fernández
EL UNIVERSAL
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