lunes, 29 de abril de 2013

La verdad de Arreaza

El Estado venezolano nunca fue bueno administrando sus empresas
SIMÓN BOCCANEGRA/TalCualDigital
El yerno más importante del país declaró el sábado que el gobierno chavista no "termina de dar en el clavo en el ámbito productivo".


Dice esto apenas unos días después de que los trabajadores de Lácteos Los Andes, empresa estatizada en 2008, manifestaran frente a Miraflores su preocupación por el mal manejo que se hace de esa compañía.

La razón para que el chavismo no le dé correctamente al clavo de la producción se debe a que el martillo que utiliza ha demostrado históricamente no servir. El yerno estudió en el exterior con una beca Gran Mariscal de Ayacucho, durante la IV, pero en materia económica no aprendió nada.

El Estado venezolano nunca fue bueno administrando sus empresas. Por poner un ejemplo, con AD y Copei las llamadas empresas básicas fueron un desaguadero de recursos. Con el chavismo ocurrió lo que parecía imposible, que la situación de esas compañías fuera todavía peor. Sidor es un caso a estudiar.

Luego de privatizada aumentó su producción y tuvo ganancias. La tomó nuevamente el Estado y va palo abajo y sin frenos. Lo que Arreaza, Maduro y compañía no terminan de entender es que el socialismo estatizante en el que creen es un martillo que no ha funcionado en ningún país donde se haya puesto en práctica.

En los cuatro continentes donde se ha intentado, su fracaso ha sido total. Para remate, estos "revolucionarios" tienen como ejemplo a Cuba, país quebrado que subsistió parte de su vida gracias a los intereses soviéticos y ahora lo hace por el petróleo venezolano.

Parafraseando a Rubén Blades, a estos "revolucionarios" los clavos les caen del cielo, pero con ese martillo lo único que le clavan al país es pobreza y atraso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario