jueves, 21 de junio de 2012

"Si vienen a atacar a Catia saldremos a protestar"

JORGE HERNÁNDEZ |  EL UNIVERSAL
Tres semanas de vigilia, a toda hora, mantienen alerta a los vecinos y comerciantes de las calles Panamerican y La Laguna de Catia luego de ser obligados a ello por funcionarios de la Fundación Caracas (Fundacaracas) y de la Sindicatura Municipal de la Alcaldía de Libertador, que, apoyados por sindicatos "bolivarianos" y la Policía de Caracas, quisieron demoler 15 comercios y doce galpones donde laboran 250 trabajadores, la mayoría de ellos, vecinos de la parroquia Sucre.


La estrategia de los residentes de Nueva Caracas y Los Magallanes de Catia se aplicó de emergencia luego de observar como miembros de Fundacaracas derribaron las santamarías de un galpón de Polar en la calle Ecuador para demolerlo con sus inquilinos adentro, y de caerle a mandarriazos a las paredes de la mueblería La Campagna, calle La Laguna, sin indemnización previa ni reubicación de enseres y trabajadores.

Wendy Ruiz, vecina y vocera de los comerciantes de la calle La Laguna, contó que las 24 horas del día se mantienen en carpas y dentro de 15 negocios para impedir "más atropellos" de la Alcaldía de Libertador.

"La Sindicatura no nos ha llamado. Tampoco le hemos consignado documentos. Tenemos cuadrillas de vecinos y comerciantes en vigilia constante. Durante el día todos estamos pendientes de cualquier acción. Por la noche otras comisiones vigilan, en cinco carpas, los comercios que arrendamos. Somos 150 trabajadores humildes de Catia", destacó Ruiz.

En una reunión de funcionarios de Fundacaracas con algunos residentes de la calle La Laguna se expuso que los 15 comercios del sector, y una vivienda de tres pisos, ahora se expropiarán para ampliar la calle Panamerican de Catia y enlazarla con Los Magallanes. "Quieren engañarlos, aquí vinieron a demoler locales para hacer mil viviendas. Una vialidad no entra dentro del Decreto de Emergencia, allí solo se incluyen viviendas para damnificados", dijo Ruiz.

Luisa Hidalgo, vecina, asegura que Fundacaracas solo negocia con 1.800 buhoneros del Mercado de Economía Popular La Laguna de Catia (Don Pollo) para desalojarlos. "Ellos no les creen porque la Alcaldía no puede hacer tantos comercios en la planta baja de edificios".

Mientras, en la calle Panamerican Héctor Vizcaya, vocero vecinal de Nueva Caracas, aseguró que se unieron a los comerciantes de seis calles de Catia para impedir expropiaciones sin pago previo. "Si vienen a atacar a Catia saldremos a protestar", anunció.

Vizcaya aseguró que ejercen acciones legales para defenderse de Fundacaracas y Sindicatura de Libertador. "Mientras vigilamos cada comercio preparamos acciones con vecinos y comerciantes para defendernos de la Alcaldía", indicó.

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