Las intervenciones de diferentes instituciones bancarias que ha ejecutado el Gobierno nacional, han hecho más sólido al Sistema Bancario Nacional. Así lo señaló, ayer domingo, el superintendente de Bancos y Otras Instituciones Financieras, Edgard Hernández Behrens.
“Con la intervención de los bancos se ha dejado más sólido el sistema bancario. Pienso que el sistema bancario se va a fortalecer de una manera muy rápida y marcada, si los bancos cumplen en realidad su función; que es contribuir con el desarrollo integral del país”, señaló.
Refirió que, hasta la fecha, han sido intervenidas 16 instituciones financieras y no se ha visto perturbado el sistema bancario, gracias a la confianza que el público tiene en las instituciones del Estado y a su respuesta rápida y eficiente.
Asimismo, destacó que el informe bancario del mes de junio, difundido la semana pasada, denota que el sistema se encuentra estable y sólido, mostrando crecimiento, al margen de la crisis mundial y de su impacto en la economía venezolana, la cual ha decrecido durante los últimos dos trimestres (-3,2% al cierre de 2009 y -5,8% durante el primer trimestre de 2010).
“Los activos del sistema bancario nacional crecieron, al igual que los depósitos de la banca. La morosidad descendió a 3,4% y la cobertura de la cartera de crédito ascendió 150%”, dijo.
Recordó que la rentabilidad de la banca en abril se situó en 18%, en mayo en 19% y, en junio, cerró en 20%.
“Son tres meses que muestran un incremento moderado de la rentabilidad de la banca en función al patrimonio. Esto le da la confianza al pueblo venezolano de que cuenta con un sistema bancario sólido”, aseveró.
Destacó que actualmente el 43% de toda la cartera de crédito de financiamiento está dirigida a sectores productivos, mientras que, anteriormente, la banca privada sólo se dedicaba a financiar el consumo a través de carteras de crédito comerciales y tarjetas de crédito, lo cual poco contribuía a impulsar el desarrollo nacional.
“Lo que desarrolla un país es el financiamiento al sector agrícola, al sector manufacturero, al turismo y al sector de las pequeñas y medianas empresas”, dijo.
Hernández considera que los bancos deberían destinar el 70% de toda la cartera de crédito a los sectores productivos, mientras que el 30% restante es el que debería destinarse al consumo, con el financiamiento al comercio y a las tarjetas de crédito.
“Esperamos que los bancos y las instituciones que quedan operando mantengan una actitud moral, ética, transparente y eficiente, respaldando el buen manejo de los recursos del Estado y del Público, para utilizar de la mejor manera los recursos disponibles, impulsando el desarrollo nacional”, señaló.
Igualmente señaló que entre las medidas más importantes que deben ejecutarse para garantizar la estabilidad del sistema financiero nacional están: limitar las operaciones en paraísos fiscales, medida que ya se emprendió; clasificar y seleccionar los custodios de los títulos valores e inspeccionar a las instituciones financieras de forma permanente sobre la calidad de sus activos, la cartera de créditos y la cartera de inversiones.
Por otra parte indicó que se hace necesario profundizar en la investigación sobre los créditos a empresas relacionadas y vinculadas a los bancos.
“El grupo Federal, por ejemplo, tenía más de 100 empresas relacionadas y la mayoría de ellas son de maletín, prácticamente sin activos, que no aparecen en los balances pero sí participan en las operaciones” añadió.
Cort. Diario 2001
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