Por Agence France Press/LOS ANGELES
La Iglesia Episcopal estadounidense nombró obispo por segunda vez a una persona homosexual, en este caso a una mujer, cuya elección había provocado una reacción virulenta del jefe de la Iglesia Anglicana, de la que depende la Episcopal.
Mary Glasspool, de 56 años, quien mantiene abiertamente una relación con otra mujer desde 1988, fue nombrada obispo por la diócesis episcopal de Los Angeles.
Es la segunda vez que una persona homosexual es ordenada obispo en la Iglesia Episcopal estadounidense después del nombramiento en el 2003 del reverendo Gene Robinson en New Hampshire, el noreste del país.
La elección de Gene Robinson había sumido a la Iglesia Episcopal y a toda la Iglesa Anglicana en una tormenta, provocando un cisma por parte de algunas diócesis y parroquias conservadoras.
Esta ruptura condujo a la Iglesia Episcopal a poner fin al nombramiento de eclesiásticos homosexuales, una prohibición que luego fue retirada.
El arzobispo de Canterbury y jefe de la Iglesia Anglicana había dicho que su elección generaría "problemas muy serios para la Iglesia Episcopal y su lugar en el seno de la comunidad anglicana''.
Mary Glasspool, de 56 años, quien mantiene abiertamente una relación con otra mujer desde 1988, fue nombrada obispo por la diócesis episcopal de Los Angeles.
Es la segunda vez que una persona homosexual es ordenada obispo en la Iglesia Episcopal estadounidense después del nombramiento en el 2003 del reverendo Gene Robinson en New Hampshire, el noreste del país.
La elección de Gene Robinson había sumido a la Iglesia Episcopal y a toda la Iglesa Anglicana en una tormenta, provocando un cisma por parte de algunas diócesis y parroquias conservadoras.
Esta ruptura condujo a la Iglesia Episcopal a poner fin al nombramiento de eclesiásticos homosexuales, una prohibición que luego fue retirada.
El arzobispo de Canterbury y jefe de la Iglesia Anglicana había dicho que su elección generaría "problemas muy serios para la Iglesia Episcopal y su lugar en el seno de la comunidad anglicana''.
Cort. El Nuevo Herald
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